Cómo conseguir el bronceado perfecto

 Cómo conseguir el bronceado perfecto
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Si realmente quieres disfrutar de un bronceado saludable y duradero, será mejor que tengas algunos consejos para disfrutar del sol, sin riesgos y obteniendo los mayores beneficios. En primer lugar, antes de comenzar tu primer día al sol, realízate una exfoliación sobre toda la zona de la piel que pretendas exponer al sol, para de esta forma eliminar el tejido muerto y permitir que el sol impacte sobre la piel joven y saludable.

El bronceador que elijas será determinante sobre el resultado que obtengas, por lo que mejor decántate por aquellos productos recomendados por un dermatólogo sin escatimar en calidad ni precio, y que presenten una graduación superior a 30 de factor de protección solar.

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Al momento de broncearte, aplica la crema de manera uniforme sobre toda la zona que vas a tratar de un lado, y tiéndete al sol dentro del horario establecido (los primeros días evita las horas punta de máxima radicación solar), durante unos 15 minutos. A continuación realiza el mismo proceso para la otra zona del cuerpo, repitiendo toda pauta durante los 3 primeros días de exposición directa al sol. Este proceso, aunque parece lento y algo tedioso, es muy importante, tanto para evitar quemaduras y manchas, como para la durabilidad del bronceado al final del verano.

Para evitar posibles molestias en la piel, así como resequedades, aplicarte loción hidratante después de cada sesión de bronceado ya que puede resultarte de mucha ayuda para mejorar el estado de tu piel. Cuando estes boca arriba no olvides de proteger tus ojos y evita cualquier contacto con cremas ya que es una zona muy sensible. utiliza “verdaderas” gafas con protección total UV.

Una vez terminada tu sesión de toma de sol, báñate y quítate la loción bronceadora. Por la tarde, utiliza una buena loción hidratante aftersun.

Y otro factor que aumentará los beneficios de tu bronceado será la ingesta de abundante agua, lo que facilitará la asimilación de vitamina D que el organismo obtiene de los rayos solares; así como el consumo de alimentos como las zanahorias o remolachas que te permitirán conservar por más tiempo el color de la piel.

Por todo lo expuesto, debes entender que lo que no debes hacer es, tomar el sol entre las doce y las cuatro de la tarde sin moverte de posición y con una crema barata de protección 15 o menos y la única ingesta de líquido una cerveza bien fría ¿ok? (mensaje para los obtusos).

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