Los dos destinos gay españoles para tus vacaciones que nunca fallan

Maspalomas e Ibiza son los dos destinos gay para el verano que nunca fallan. Si no sabes que destino escoger para tus vacaciones y quieres un lugar donde el ambiente gay sea algo importante, estos dos dos tus destinos.

MASPALOMAS

Es un clásico, sí, pero nunca falla. Unas playas maravillosas, unos hoteles incleíbles a precios más que razonables y un ambiente gay concentrado principalmente en el Centro Comercial Yumbo, es una combinación que no la poseen ni los mejores cócteles del momento. Las dunas de más Maspalomas son internacionalmente conocidas dentro del circuito gay de destinos imprescindibles a visitar. Todo y así, como nadie es profeta en su tierra, aún hay alguno de por aquí que no se ha dejado caer. Así pues, este año no hay excusa. Para localizar la zona de baño 100×100 gay deberás llegar hasta el Kiosko Beach nº7, una bandera arcoiris preside esta pequeña “meca”. Para poder llegar, deberes cruzar parte de las dunas, algo que si bien en el desierto seria un trabajo casi imposible, aquí no lo es, porque la romería que encontrarás de gente trajinando para arriba y para abajo te indicará el camino. Por la tarde-noche, el gran protagonista es el C.C. Yumbo, un nicho bares, restaurantes y antros de todo tipo para satisfacer a los más exigentes. Sólo una advertencia: la mayoría de los turistas son alemanes y franceses, así que los gustos están adaptados a ellos en todo, no por ello lo dejarás de disfrutar y es que ¡por eso estás de vacaciones!

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IBIZA

Gay o no gay, Ibiza siempre está de moda, y más en verano. La rutina en la isla es de lo más sencilla, por la mañana – sin madrugar- directos a cualquiera de las playas que rodean la isla. Por lo menos un día de tus vacaciones, tienes que acercate por el Chiringay, no verás más gays por metro cuadrado en la isla de los que podrás encontrar aquí. Eso si, tampoco te esperas gran cosa. No olvides que principalmente es una playa nudista. Después del baño matutino y si has podido (o querido) ligar, podrás quedar por la tarde en algunas de las cientos de terrazas y locales de moda para tomar algo. En Dalt Vila es donde encontrarás la esencia de Ibiza, la de siempre. Pasearte por todas las tiendecitas de trapitos, bañadores y complementos es otro deporte muy practicado para hacer tiempo hasta la hora de cenar. Para los que el ir de compras les da hambre (aunque solo sea por la cantidad de chulazos que se vas a encontrar, probándose todo lo imaginable), cenar en la parte vieja de la ciudad, es quizás el momento más mágico y tranquilo del día. Luego ya llega la noche, esa parte tan importante y que ha hecho famosa la isla, ¡llega la marcha! Música y desfase.