Recelos injustificados

 Recelos injustificados

Recelos injustificados

Comparte este contenido rápidamente en:

A nadie le gusta saber que le han puesto los cuernos.

En primera instancia, te sientes destrozado y engañado, para pasar a un estado de impotencia e ira.

Hay ocasiones en las que vemos comportamientos algo raros y no sabemos a qué atribuirlos; pensamos que tal vez no nos están engañando, pero no estamos seguros. Para saber si te están engañando sigue estos sencillos pasos, puede que te sirvan o no. Pero quizás te desvelen alguna duda. Estos indicadores no quieren decir que él te esté engañando. Simplemente son indicios. Si quieres saber la verdad, tendrás que hablar con él.

Son muchas las parejas que no llegan a estar seguras de sus sentimientos hasta que se les presenta el momento de convivir en pareja. La realidad es que en el día a día es cuando se demuestra si una pareja se ama y respeta realmente. Las rutinas diarias repetidas incansablemente, ponen a prueba el respeto y tolerancia de cada uno de los componentes de la pareja y para la mayoría son motivo de discusión y malestar continuo.

Publicidad

Aceptando las diferencias y aprendiendo a convivir con ellas, estamos acertando de pleno. Estamos delante de la clave de la convivencia, ideal para establecer nuestra propia política de pactos, pequeños acuerdos caseros que nos evitarán muchos conflictos cotidianos

ES MÁS AFECTUOSO O MUY DISTANTE

Todos los secretos terminan saliendo a la luz, muchas veces revelados por nosotros mismos (y no necesariamente por nuestra boca, sino por nuestro comportamiento). A veces tenemos la suerte que el resto se da cuenta, otras no. Un hombre que ha engañado a su novio lo manifiesta en muchas ocasiones a través de sus actos o de la falta de ellos. Lo peor es que muchas veces es obvio para terceros, pero el novio no tiene ni idea. El afecto, sea abundante o escaso, es una manifestación física de las emociones. Por tanto, cuando este cambia es porque lo han hecho también los sentimientos. El truco está en determinar cuál es la causa real de ese cambio de comportamiento.

ES MUY CRÍTICO CON TODO LO QUE HACES

Otro modo en el que los hombres intentan cubrir sus pistas es proyectando su culpa en la pareja. Si comienza a reaccionar exageradamente en cosas de poca importancia, probablemente su subconsciente está tratando de hacerle sentir mejor acerca de sus propias transgresiones buscando un comportamiento culpable en otros. Algo parecido mirar a otro hombre puede desencadenar un episodio de ira.

NO RESPONDE A TUS CITAS

Cuando no pasas todas las noches con tu pareja, normalmente sigues en contacto con el vía mensajes de texto, correo electrónico, teléfono, twitter, facebook, palomo mensajero, o lo que sea. Por tanto, será fácil darte cuenta cuando dejas de tener contacto por largos períodos de tiempo. A veces esto es consecuencia de un aumento en la carga de trabajo o de responsabilidades familiares, pero desafortunadamente en otras significa que no hay fidelidad. Antes de colocarle un GPS para saber dónde está siempre, puedes hacer algo de “trabajo de reconocimiento” para saber dónde ha estado todo ese período de tiempo incomunicado. No hay daño alguno en entablar alguna conversación inocente con sus amigos en donde casualmente mencionas los lugares a los que él te ha dicho ir y medir sus respuestas en la escala de “despreocupado” a “visible y extremadamente incómodo”. Cuando todo se ha dicho y hecho, tu radar no ha detectado nada y tu novio sigue distante, probablemente no estás queriendo admitir algo que es verdad.

Publicidad

YA NO SALES DE MARCHA CON SUS AMIGOS

Como se mencionaba líneas arriba, un cambio drástico en una relación es siempre causa de preocupación. La preocupación debe ser doble si el cambio es también social. Si solías pasar las noches de los sábados con tus amigos, sus amigos o una combinación de ambos y ya no es así, la única razón real por la que querría comenzar a salir solo con sus amigos todo el tiempo es que hay algo detrás (a menos que sea noche de chic@s, pero eso tampoco será tan frecuente). Una o dos salidas de vez en cuando no deben volverte loco de celos, pero si se vuelve muy frecuente e insiste vehementemente en que no vayas a determinados eventos sin una razón válida, puedes tener a un infiel al lado.

HABLA MUCHO DE UN HOMBRE EN PARTICULAR

Quizás sea “ese chico chistoso de administración” o “mi amigo Raúl, tú sabes, el que conociste en la fiesta de Jorge”, pero un hombre al que le ha empezado a gustar alguien más además de ti mencionará el nombre del otro tipo con frecuencia, tal vez para asegurarse a sí mismo que “nada está pasando” (porque te lo mencionó a ti, lo que es algo así como “contarte todo lo que hace”) o hacer menos probable que pienses que es raro que empiece a salir con él todo el tiempo. Por supuesto, es perfectamente normal tener amigos, pero cuando el nombre de otro tipo se convierte en parte frecuente de tu conversación, deberías pensar por qué gasta tanto tiempo pensando y hablando de él contigo.

 

Post relacionados: