Un tema de cuernos

 Un tema de cuernos
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MÁS DE LA MITAD DE LOS GAIS LE HAN PUESTO LOS CUERNOS A SU NOVIO

Sabíamos todos, porque entre otras, siempre conocemos a un amigo, o amigo del amigo que ha vivido en sus carnes la experiencia de haber sufrido eso que llamamos «cuernos», al final, es un recurso más de las conversaciones de marujeo entre amigotes que solemos utilizar todos. Vivirlos y «sufrirlos» ya es otra historia y lo que más te va a sorprender es cuántos lo están sufriendo.

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Según una encuesta publicada por la revista FS Magazine en colaboración con la Health Equality and Rights Organization parece que más de uno y de dos y de tres conocen y han vivido esa «divertida experiencia» porque más de la mitad de hombres gais y bisexuales le han puesto los cuernos a su novio. ¡Toma ya! El estudio realizado entre 961 hombres gais y bisexuales, arroja unos resultados sorprendentes, dejando claro que el 58% de los entrevistados ha llevado cuernos puestos alguna vez porque alguna de sus parejas le ha sido infiel en algún momento. Tranquilo, no corras aún a empezar el drama porque aquí no todos somos víctimas: el 52% de los encuestados afirma sin cortarse que ha puesto los cuernos alguna vez. ¡Chúpate esa!

Y, como puedes imaginar, la cosa se pone aún peor (vamos dosificando poco a poco para que no te de un berrinche). Porque en cuestiones de ser unos hijos de puta, a los seres humanos no nos gana nadie (sólo hay que mirar alrededor, poner la tele…etc.). Dentro de ese 52% que alguna vez ha puesto los cuernos, un 45% asegura que su pareja aún no sabe que lleva los cuernos puestos por la vida y un 61%(coge aire, que te ahora sí te vas a poner como una moto) han seguido con el affaire en múltiples ocasiones sin decírselo a su novio, es decir, hablando en fino, que no fue eso de «sí, me lo tiré, fue un desliz de verano», no, no, queridos, «me lo follé, una y otra vez, hemos quedado a follar varias veces, vaya», sin más.
Sí, es indignante. Claro que aún es más indignante que un 17% de los encuestados asegure que, a raíz de esa infidelidad, contrajo VIH u otra ETS. ¡Ahh! Amigo…aquí ya empiezan las palabras mayores. El follar siempre con el mismo, tendrá alguna ventaja ¿no? Pero es que además hay que ser gilipollas para follar con el primero que pasa y sin precauciones… en fin… Como dice el dicho «quien algo busca, algo encuentra»

En caso de que tengas una pareja abierta y creas que la cosa no va contigo porque tú y tu novio os dais libertad y no os dejáis oprimir por las normas de la heteronormatividad y el patriarcado… eres una pringao. El 40% de los encuestados que forman una pareja abierta asegura que él o su pareja han roto las normas de la pareja en alguna ocasión. Espera, espera: «Ja – Ja – Ja» ahora me río yo. Ian Howley, el director ejecutivo de la Health Equality explica que, el gran problema, es que “algunos hombres gais están cometiendo los mismos errores (que las parejas heteros) en cuestiones de comunicación, confianza y límites.” En opinión de Howley, algunas parejas gais tienen serios problemas a la hora de comunicarse, sobre todo en cuanto a temas sexuales: “Hay un enorme problema de hombres gais que no son capaces de hablar con otro sobre lo que les gusta sexualmente.”
Podrías pensar ahora que Howley está equivocado ya que no ha visto tus conversaciones en Grindr en las que antes de preguntar el nombre del fulano ya sabes todo lo que os va sexualmente a ti y al maromo en cuestión. Pero sabes perfectamente que lo que dice es verdad porque ¿cuántas parejas has tenido -o conoces- que tienen problemas por no atreverse a hablar claramente de lo que desean sexualmente? (La mayoría de las veces porque “lo que desean sexualmente” es acostarse con otros, claro). Como explica Howley, “por supuesto que el sexo es importante en cualquier relación, pero no puedes y nunca podrás satisfacer las necesidades de otra persona el 100% del tiempo. Y somos bobos al poner esa presión sobre nosotros. Si eres afortunado y encuentras a alguien que lo hace por ti, que está ahí para ti emocionalmente, físicamente y te trata con el respeto que mereces, entonces has de trabajar en la relación. Dejar morir una relación únicamente por el sexo es una tontería. Muy a menudo el otro trabajará contigo, podréis trabajar juntos para explorar opciones que mantengan vuestra relación muy fuerte.” Es decir: que si quieres a tu novio y lo que pasa es que sexualmente buscas otra cosa, siéntate con él y díselo antes de que le mandes a tomar por saco porque no te la pone tan dura como cuando le conociste. A lo mejor tú tampoco se la pones tan dura a él y en vez de meteros en una espiral de cuernos y traiciones es mejor ser adultos, olvidarse de lo que hacen las otras parejas y buscar lo que podéis hacer vosotros para manteneros a flote. Si en cambio eres de esos que de los que creen en el refrán hetero de «tiran más dos tetas que dos carretas» (traducción gay: tira más una gran polla que… ¡y yo que sé!), pues eso,que vale, pues ves a por la polla de 30cm…. que, en unos años, te darás cuenta de todo lo dicho, pero claro… se te
habrá pasado el arroz y la oportunidad para solucionarlo.

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